Fútbol, ​​seis nuevos “managers deportivos” formados en Ischia

El Instituto “Gaetano Filangieri” de Frattamaggiore acogió un momento significativo para el fútbol amateur de Campania: la prueba final del curso “Sports Manager”, promovido por el Comité Regional de Campania de la FIGC – Lega Nazionale Dilettanti.

Entre los participantes se encontraban también cinco estudiantes del Instituto Técnico Estatal Enrico Mattei, quienes tuvieron la oportunidad de asistir al curso gratuitamente: Andrea Pinto, Rosario Licciardello, Christian Castiglione, Luca Colella y Francesca Di Gregorio. Junto a ellos, para demostrar el valor transversal de la formación, también estuvo Salvatore Castagna, presidente del club deportivo Lacco Ameno, en representación de la realidad futbolística de la isla. Una presencia que fortalece el vínculo entre territorio, escuela y deporte, destacando cómo las islas no se quedan al margen, sino que participan activamente en el crecimiento del movimiento amateur.

Los certificados de participación fueron entregados personalmente por el presidente de la FIGC Campania, Carmine Zigarelli, quien animó a los estudiantes con palabras sencillas pero contundentes: «Quien no entrena, para». Una filosofía que fundamenta todo el proyecto formativo, nacido con el objetivo de formar directivos capaces, conscientes y preparados para afrontar los retos y responsabilidades del fútbol base.

El curso, dividido en varias lecciones teóricas y prácticas, cubrió todos los aspectos fundamentales para quien quiera trabajar dentro de un club deportivo: desde la reglamentación federativa hasta la justicia deportiva, desde las membresías hasta los trámites burocráticos, hasta la gestión económica y contable de las asociaciones de aficionados.

También se dedicó un amplio espacio a la dimensión humana y relacional del rol: construir un diálogo efectivo con entrenadores, atletas y familias, comunicarse con claridad y saber cómo potenciar la función educativa del deporte, especialmente en el sector juvenil. Precisamente en este ámbito, se dedicó especial atención a la protección de los menores y a la colaboración entre escuelas y clubes deportivos.

La prueba final fue el último paso del camino: quienes la aprobaron obtuvieron el certificado oficial que les permite trabajar como entrenador acompañante o entrenador responsable en los equipos afiliados a la FIGC. Un hito importante para muchos, un punto de partida para construir, con habilidad y pasión, un fútbol amateur cada vez más estructurado, inclusivo y cercano a las comunidades. Incluso a las, a menudo olvidadas, de nuestras islas.